Son lindas y sencillas y, aunque a simple vista no lo parezcan, están hechas con neumáticos reciclados y retazos de la industria textil. Son las zapatillas ecológicas que ahora salen a conquistar el mundo. Fueron diseñadas por tres amigos mendocinos (Alejandro Malgor (34) , Ezequiel Gatti (40) y Nazareno El Hom (36), quienes, con la idea de hacer algo diferente, con compromiso social y ambiental, crearon la marca Xinca. El catálogo de productos incluye zapatillas urbanas y zapatos de trabajo. El año pasado vendieron 12.000 zapatillas y este año esperan aumentar las ventas en un 40 por ciento. Y como novedad comenzaron a exportar a Chile y Uruguay. Entre los planes de expansión también tienen un proyecto en Australia para comenzar a replicar los modelos, con producción e inclusión. La idea de crear estas zapatillas surgió tendiendo en cuenta que en Argentina se produce 1 kilo de basura por habitante por día. La primera decisión que tomaron fue elegir qué basura usar. “Después de investigar mucho, descubrimos el problema de los residuos de neumáticos fuera de uso. En nuestro país se desechan más de 100.000 toneladas por año y un solo neumático tarda entre 500 y mil años en degradarse. Hasta hoy, la mayor parte de las gomas que se desechan son enterrados o incinerados, lo que causa un daño ambiental gigantesco”, cuenta Alejandro Malgor. Luego de varios ensayos, a mediados de 2013 lograron el prototipo de zapatilla realizada en un 50 % con suela de caucho de neumáticos reciclados, 50 % de caucho puro y capelladas trabajadas con retazos que deshecha la industria textil. La logística para conseguir los neumáticos no es demasiado complicada. “Son fáciles de conseguir. Y no hay que ir demasiado lejos: una gomería de barrio desecha alrededor de 200 por mes. Incluive muchas empresas de transporte nos contactan todas las semanas para ver si nos pueden entregar las gomas viejas de sus camiones”, comenta Malgor. El reciclado de los neumáticos se realiza en plantas ubicadas en Buenos Aires y en Mendoza. Después de un proceso de separación de los metales del caucho, se obtiene un polvo de caucho. Ese reciclado se mezcla con la goma virgen. Buena parte de los recicladores pertenecen a organizaciones sociales. 'Para todas las etapas de producción incorporamos personas excluidas del sistema, gente que tiene problemas para conseguir un trabajo formal. Hoy trabajamos con cinco ONGs', agrega. Una parte de la producción se produce en el Penal San Felipe de la ciudad de Mendoza. En el taller de la cárcel trabajan más de 80 internos de entre 20 y 50 años que recibieron una capacitación e incorporaron conceptos como la importancia del trabajo y la oportunidad de seguir trabajando cuando finalicen sus condenas. Las zapatillas cuestan entre $ 750 y $ 900 y se pueden conseguir en la tienda online de Xica, en Mercado Libre y en tiendas multimarcas.